Satélites latinoamericanos al servicio del pueblo
El Gobierno Bolivariano aprovecha hoy las ventajas tecnológicas que ofrece el satélite de observación Francisco de Miranda para desarrollar, por ejemplo, proyectos de teledetección.
Algunos países latinoamericanos celebran importantes avances en áreas como telemedicina, teleeducación, monitorización y observación geográfica, para desarrollar proyectos tecnológicos que derivan en beneficios para la ciudadanía, desde la puesta en órbita de sus primeros satélites propios. Bolivia y Venezuela son dos muestras de cómo el camino para conquistar la soberanía ultraterrestre se transforma en un bien social.
Recientemente, el Gobierno de Bolivia premió dos iniciativas tecnológicas en el concurso nacional Telecentro satelital. Inclusión con innovación. Ambos proyectos, uno en salud y otro en prevención de desastres naturales, permiten mejorar la calidad de vida en áreas rurales, aprovechando la infraestructura de los Telecentros Satelitales Integrales.
Los jóvenes Guido Llanos y Diego Cárdenas, del departamento de Cochabamba, desarrollaron una aplicación capaz de monitorizar signos vitales de un paciente, mediante sensores electrónicos, los cuales se envían automáticamente a un servidor web a través de Internet. “Un doctor puede, desde cualquier parte del mundo, conectarse a la aplicación y obtener datos del paciente en tiempo real, evaluarlos, realizar su diagnóstico (…) e incluso, prevenir y alertar de situaciones riesgosas”, explicó Cárdenas.
El otro proyecto ganador fue obra de Eynar Calle y Edgar Ramos, también de Cochabamba, quienes crearon un “Sistema de monitorización continuo de condiciones ambientales para el control de desastres naturales”, el cual permite evaluar las condiciones ambientales (temperatura, humedad y monóxido de carbono) ante posibles desastres naturales.
Al respecto, Ramos explicó que el proyecto contempla dos partes: “la primera corresponde a conectar una antena satelital a un satélite específico desde cualquier lugar. La segunda es recolectar variables en un radio aproximado de un kilómetro, para conocer las condiciones ambientales alrededor del telecentro satelital”.
Para el año 2017 América Latina contará con un total de 98 satélites, 26 de ellos nuevos. http://t.co/xecXbOD7WH http://t.co/3KEiiNZA5J
— Conatel Venezuela (@Conatel) junio 18, 2015
En el caso de Venezuela, el Gobierno Bolivariano aprovecha hoy las ventajas tecnológicas que ofrece el satélite Francisco de Miranda para desarrollar, por ejemplo, proyectos de teledetección que impulsan la producción agrícola nacional, así como también investigaciones para determinar el impacto ambiental de las actividades mineras ilícitas en el Territorio Esequibo y toda la región sur del país.
Además, ingenieros venezolanos trabajan en la creación del tercer satélite venezolano, gracias a la cooperación con la República Popular China en materia aeroespacial. Esta alianza estratégica también permite la capacitación de recurso humano para inaugurar, próximamente, la primera fábrica venezolana de pequeños satélites, gracias a una política de Estado fundamentada en uno de los objetivos de la Ley del Plan de la Patria: lograr la independencia tecnológica de la nación.
25 agosto, 2015